El nombre de la compañía automovilística alemana, Mercedes-Benz, se remonta en el siglo XIX. 

Su nacimiento comienza en Alemania en el año 1889 dando lugar a Benz & Co y un año más tarde nacerá la segunda compañía con el nombre de Daimler-Motorsen Gesellchaft. Estas empresas permanecerán independientes hasta el año 1924, cuando se produce la fusión entre ambas.

Una de las personas más importantes en la empresa es Emile Jellinek, cónsul diplomático, empresario de orígen astrohúngaro y fundador en 1902 de la marca Mercedes-Benz.

Emile tuvo una hija en 1890 a la que llamó Mercedes y que será el origen de la marca. Nueve años más tardes, Emile se interesó por el mundo de la automoción y compró Daimler Phoenix con el que participó y ganó en Tour de Niza con el seudónimo de Mercedes.

Años más tarde, Jellinek invirtió en una cláusula donde se determinaba que uno de los modelos de la compañía debía llamarse Mercedes. En 1902 todos los modelos se llamaban Mercedes, hasta que se fusionaron ambas compañías y se le añadió Benz al nombre de la marca, dando lugar a una de las empresas más reconicidas en el mundo de la automoción.