En cuanto a gustos no hay nada escrito. En las formas de viajar, tampoco. Desde hace unos años, el turismo clásico ha empezado a decaer tímidamente, mientras que se ha producido un repunte de destinos más exóticos donde se busca vivir experiencias nuevas. Aquí es donde empieza la historia de la Ruta 666, una carretera directa al misterio que cada vez es visitada por más gente.

En 1926, la Agencia Federal de Carreteras y Transportes asignó de manera aleatroria Ruta 666 a una vía de casi 200 kilómetros que atravesaba el suroeste de Estados Unidos. En principio, una carretera más casi sin tránsito que atravesaba los estados de Utah, Nuevo México, Arizona y Colorado. Sin embargo, esta nomenclatura hizo que desde su fundación se creara un halo de misterio en torno a ella.

Muchos enigmas en torno a la Ruta 666

Al principio, este número relacionado con el Diablo provocaba que los más supersticiosos evitaran esta carretera a pesar de realizar más kilómetros. Las leyendas urbanas que se iban formando alrededor de esta vía tampoco ayudaba mucho a que se despejaran dudas en torno a ella. Estos accidentes, apariciones e incluso muertes que se achacaban a la circulación por este acceso generaba miedo en torno a los conductores.

ruta 666

No obstante, los responsables de tráfico de la zona no podían negar la evidencia. Según los datos, esta carretera promediaba un número de accidentes mucho mayor en comparación con otras similares. Incluso, el número de llamadas de emergencia eran bastante más elevadas en este lugar que en vías similares. Esto saltó a los medios y la Ruta 666 pasó a figurar entre las 20 carreteras más peligrosas de EEUU.

La Policía investigó estos misteriosos hechos y pronto dio con la clave. El monótono recorrido, unido a la ausencia de cuerpos de seguridad (lo que acrecentaba la velocidad media por la zona) y las temperaturas extremas provocaban un mayor número de accidentes. Sin embargo, muchos seguían sin atender a estas razones de la policía y mantenían que esta carretera estaba maldita. Ante tanta polémica, la Administración Federal tuvo que dar su brazo a torcer y en 2003 terminó cambiando el nombre de la Ruta 666 por Route 491 para intentar dejar estas falsas historias en el pasado.

A pesar de los años pasados desde entonces, los conductores que pasan por esta carretera mantienen que esta vía sigue teniendo un halo especial a misterio y sigue concentrando un alto nivel de visitas. Y tú, ¿te atreves a recorrer la Ruta 666?

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