Los falsos mitos sobre los coches de gas natural comprimido
En los últimos años, se han desarrollado algunas alternativas a los combustibles fósiles más limpias para ayudar a reducir las emisiones de gases. Por eso, las opciones eléctricas y de gas natural para coches se están volviendo más populares, ya que ofrecen un servicio más limpio, más económico y con mejores prestaciones. Hoy, concretamente, vamos a hablar sobre la alternativa del gas natural.
Es cierto que actualmente esta alternativa no está teniendo mucho tirón en este país, pero se están produciendo diferentes opciones con este combustible. Mercedes Benz lleva desarrollando en los últimos años diferentes versiones de las clases B, E y Sprinter impulsados con gas natural, aunque actualmente estos modelos no se están comercializando en España.
Qué hay que saber sobre el gas natural en coches
Este combustible aplicado a la automoción no se lleva usando demasiado tiempo en nuestro país, pero sus beneficios son numerosos. En cuanto a coste, se estima que usando un coche de GNC se pueden llegar a conseguir ahorros de hasta el 35% si lo comparamos con el gasoil y hasta el 65% en comparación con uno de gasolina, ya que el precio de este combustible es notablemente menor al de los más tradicionales. Además, existen diferentes bonificaciones para los usuarios que opten por el uso de este tipo de coches.
En cuanto a beneficios ambientales, este vehículo GNC reduce notablemente las emisiones de CO2 al aire, concretamente un 17% menos de media si lo comparamos con un coche de gasolina convencional. Además este ‘rendimiento verde’ provoca que estos coches estén clasificados dentro de la categoría ECO, por lo que tienen privilegios en muchas ciudades a la hora de circular.
Otros falsos mitos que desmontar de los GNC
Una de las principales dudas que siempre ha generado este tipo de coches es en el apartado de la seguridad. Muchos de los conductores tienen reservas acerca de conducir con un coche que alberga un depósito de un material peligroso como es el gas natural. Sin embargo, esta desconfianza no tiene demasiada base. Los almacenamientos de estos coches GNC pasan estrictos controles de seguridad y cuentan con mecanismos en caso de accidente para minimizar las consecuencias. Incluso, podemos decir que estos depósitos son más seguros que los de gasolina, ya que son más resistentes en caso de accidente o de incendio.
El mantenimiento de estos coches tampoco supone un problema, ya que la mecánica es muy similar al de los tradicionales. Además, cuenta con la ventaja de poseer motores bifuel, por lo que el problema de la autonomía que existe en los motores eléctricos queda olvidado. Estos coches utilizan la fuerza generada por el gas natural, pero, si esta se agota durante el recorrido, el motor pasa automáticamente a utilizar una reserva de gasolina que tiene incorporado, reduciendo notablemente la posibilidad de quedarse tirado mientras conduces.
En definitiva, estos coches GNC son una opción de futuro y, cada vez, más de presente. Según los datos, en 2017 crecieron en un 237% las matriculaciones de vehículos a gas, lo que da buena cuenta de la cada vez mejor acogida que está teniendo en nuestro país.
Si estás interesado en un Mercedes-Benz nuevo aquí puedes ver todos los modelos.
Si prefieres un Mercedes ocasión, te ofrecemos los mejores precios.