¿Sabes la TÉCNICA para ser el MEJOR CONDUCTOR?

Son numerosas las veces, que marchamos en nuestro coche y no nos damos cuenta de la distracción que ejercemos en la conducción, por culpa del uso del teléfono móvil. Se trata de un factor de riesgo evitable que aumenta el riesgo de accidente, en altas probabilidades. Aproximadamente, el 30 % de los mal llamados accidentes de tráfico tienen su origen en, al menos, una distracción.  ¿Cómo ser mejores conductores? La siguiente técnica, es la clave.

¿Cómo ser mejores conductores? La siguiente técnica, es la clave.

Evidentemente, el 30 % no es un porcentaje mayoritario, pero es que el otro 70 % se incluye en temas de drogas, cansancio-fatiga-sueño, enfermedades, asuntos achacables a la vía y su falta de mantenimiento, climatología, el estado del vehículo… En general, es visible que un tercio de los accidentes de tráfico tienen que ver con estar pendientes de algo totalmente ajeno e innecesario en la conducción. Esto se denomina como conductas interferentes. Por ejemplo, utilizar el móvil durante la conducción.

Es cierto que la mayoría de veces que realizamos cualquier acción, no somos conscientes de todo lo que esta supone. Por ejemplo, cualquier persona puede considerar que el chaleco que se pone a diario es el de mejor calidad del mercado. Sin embargo, habrá gente que sepa que ese chaleco es de mala calidad y puede rozar la imitación. Mientras tanto esa persona, sigue siendo feliz y consciente de que su prenda es envidiada por todos. Hasta que las circunstancias no desemboquen en conocer la verdadera realidad, vivirá en su mundo paralelo. De igual forma, llega a ocurrir en la conducción.

¿Uso del móvil?

El uso del móvil  puede no suponer un error, puesto que consideramos que la duración de esta es de segundos. A pesar de todo, esos segundos pueden ser mortales. La atención permite que las decisiones que tomamos como conductores se lleven a cabo de forma adecuada. Por un lado, nos mantiene en estado de alerta; por el otro, hace posible que esa alerta se vuelque en aquello que nos interesa cuando estamos conduciendo, descartando así cualquier elemento ajeno a la conducción. Cabe destacar que conducir con un nivel de atención máximo es prácticamente imposible, además de poco recomendable. Imposible, porque siempre habrá cosas que pasen, que no podremos pasar por alto. Poco deseable, porque prestar un nivel excesivo de atención propiciará el aumento de la fatiga y el cansancio al volante, lo que nos llevaría fácilmente a la distracción. Se necesita adaptar la conducción a todas las circunstancias que se den en el tramo.

Todo depende de nosotros mismos. Mi consejo es la coherencia. Dudo mucho que importe una demora más o menos amplia. Si es urgente, detén el vehículo.

 

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