Del frenado automático al Big Data: las tecnologías que llegarán a tu coche
El sector del automóvil está viviendo una auténtica revolución en los últimos años. La competencia entre las marcas está provocando que los adelantos tecnológicos y a nivel de prestaciones haya crecido de manera notable en los últimos años. Los dispositivos se están sofisticando para mejorar la experiencia de los conductores dentro de los coches, teniendo un importante objetivo: la implantación del Big Data.
Estos dispositivos están destinados, principalmente, a mejorar la seguridad del usuario mediante diferentes mecanismos. Sin embargo, las aplicaciones de los mismos son muy diversas y con objetivos que también buscan mejorar la experiencia de conducción.
De la frenada automática a los hologramas
Repasando algunas de estas innovaciones, la que parece más próxima es la frenada automática. Se trata de un mecanismo por el cual el coche frena automáticamente cuando predice un posible impacto, ya sea por despiste del conductor o por somnolencia. Una acción destinada a disminuir el número de accidentes en carretera o, al menos, reducir su impacto. El arranque a través del móvil también es otro de los avances que está muy cerca de llegar a la automoción. De esta manera, el acceso a nuestro coche será mucho más sencillo sin depender de una llave, algo que dificultaba sobremanera la organización en las flotas.
Si vamos un paso más allá, podemos encontrar algunos dispositivos más complejos con los que mejorar el rendimiento de nuestra conducción. El manejo teledirigido es otro de los recursos que parece que cada vez se acercan más a ser realidad. A través de este dispositivo, el usuario puede realizar acciones más precisas con su coche desde fuera con el smartphone, como aparcar en lugares muy complejos. Otro de los adelantos que también está en proyecto serían el de los hologramas, que vendrían a mejorar las actuales pantallas táctiles. De esta manera, el conductor puede realizar diferentes acciones de manera más intuitiva y sin tener que desviar la vista de la carretera.
La integración del Big Data, el próximo gran logro
Sin embargo, el próximo gran logro de la automoción será el Big Data. Este sistema que ya se usa en diferentes ámbitos como la publicidad o los ecommerce, puede ser de gran utilidad en el ámbito de la conducción, ya que puede ayudar a predecir diferentes situaciones y evitar accidentes. Para informarnos sobre esta tecnología hablamos con Secmotic, empresa desarrolladora de plataformas IoT (Internet of Things) seguras. Jaser Abdel-Kader, su responsable de Desarrollo de Negocio, nos habla de la futura repercusión del Big Data en el sector:
“Será un pilar básico en la movilidad autónoma. Los sistemas de Inteligencia Artificial que incorporará el coche autónomo ‘aprenderán’ gracias al análisis de grandes cantidades de información procedente de la vía a través de sistemas de visión artificial, de los datos electromecánicos generados por el propio coche e incluso también del propio conductor, de sus gustos y preferencias. Cuanta más información sea capaz de analizarse, mejor será la respuesta de los sistemas de conducción autónoma ante cualquier tipo de incidencia”.
La privacidad, la principal controversia
La privacidad es una de las principales cuestiones polémicas sobre el Big Data. Jaser Abdel-Kader nos cuenta su visión acerca de este caso: “Se trata de llegar a un compromiso, el usuario ha de tener en cuenta que cede ciertos datos a cambio de que se le proporcione un servicio de alto valor añadido. Lo realmente importante es que el usuario esté bien informado de qué datos cede y para qué. En este sentido, la entrada en vigor del nuevo reglamento de protección de datos de la Unión Europea (GDPR) permitirá proporcionar a los ciudadanos un mayor nivel de control sobre sus datos personales”.
A pesar de todo, lo fundamental son los beneficios que tendrá en nuestra vida diaria: “Está claro que el desarrollo de IoT en este caso, el sector de la automoción, tendrá repercusiones positivas para las empresas pero el IoT propone un modelo de ecosistema entre objetos y usuarios enfocado a mejorar la vida de las personas. Un ejemplo podría ser la interconexión e intercambio de datos entre nuestro vehículo y nuestra casa: cuando nos aproximáramos de vuelta a casa después del trabajo, la casa podría empezar a precalentar el horno, activar la climatización o abrir la puerta del garaje cuando estuviéramos a pocos metros”.
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