Revisión de frenos: ¿cuándo realizar el mantenimiento?
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El sistema de frenado es el responsable de detener el vehículo y uno de los componentes más importantes de tu coche. Su correcto funcionamiento es vital para que puedas conducir de forma segura, incluso en situaciones extremas como una frenada de emergencia que pueda evitar un accidente. Por este motivo es importante hacer una revisión de frenos de forma periódica y comprobar el estado general del sistema.
Aunque se trate de Mercedes nuevos o de cualquier otro vehículo usado o de km 0, todos los coches deben someterse a un mantenimiento del sistema de frenos. De este modo, se puede detectar el desgaste de estas piezas y si algún componente presenta algún tipo de desperfecto. En Grupo Concesur realizamos este tipo de inspecciones periódicas coincidiendo con los trabajos de mantenimiento A y B de tu Mercedes Benz.
Mantenimiento del sistema de frenos: ¿qué revisar?
El sistema de frenos de un automóvil moderno, por lo general, está compuesto por discos, pinzas y pastillas. Su funcionamiento es muy sencillo. Al pisar el pedal de freno, la bomba envía presión a través del líquido de frenos a las pinzas. Dentro de estas, uno o varios pistones ejercen fuerza sobre las pastillas que, mediante la fricción con los propios discos, permiten frenar el vehículo.
Así, en una revisión de frenos se debe comprobar el estado de estos tres componentes: discos, pastillas y líquido de frenos. Nuestros técnicos se encargan de revisar el desgaste de los propios discos, así como su estado, para comprobar que no presenta grietas ni ondulaciones. También es importante revisar las pastillas de freno. Así, podemos verificar que su desgaste es regular y que no se están cristalizando por los contrastes de temperatura o la falta de uso.
El siguiente punto a revisar es el líquido de frenos. Comprobaremos que el nivel sea el indicado por el fabricante para descartar posibles fugas. Además, con el paso del tiempo y la acumulación de kilómetros, este fluido hidráulico pierde sus propiedades y puede verse afectada la capacidad de frenado del coche. Es recomendable su sustitución periódicamente.
Como parte del mantenimiento preventivo del sistema de frenos comprobaremos que no se detecten fugas de líquido en todo el circuito. También es necesario revisar los latiguillos del sistema de frenado del vehículo para verificar su estado, que no presente grietas o signos de desgaste acusado.
Mantenimiento de los frenos de tambor
Los frenos de tambor también tienen mantenimiento. Aunque es un sistema de frenado cada vez menos frecuente en coches nuevos, muchos son los vehículos, especialmente en segmentos pequeños, que aún los equipan. En este caso, el funcionamiento es sencillo. El tambor gira con la rueda. En su interior, dos zapatas entran en contacto contra la superficie interna del tambor al presionar el pedal del freno. Esto permite ejercer fuerza de frenado sobre las ruedas y detener el vehículo.
El tambor presenta una mayor durabilidad que el resto de componentes del sistema de frenado, pero es importante verificar que no presente deformaciones, grietas, surcos u óxido. Por otro lado, las zapatas son la pieza que mayor desgaste acusa, por lo que deben ser revisadas anualmente o cada 20.000 kilómetros para verificar su estado. También cuentan con líquido de frenos (en frenos hidráulicos de tambor), por lo que será importante verificar su estado y nivel en cada revisión de frenos.
¿Cada cuánto tiempo se realiza una revisión de frenos?
Es importante que nunca agotes la vida útil de ninguno de los componentes que forman parte del sistema de frenado de tu Mercedes. En la revisión de frenos comprobamos su estado general y te recomendaremos la sustitución de aquellas partes que estén desgastadas o deterioradas. La seguridad al volante es lo primero, por ese motivo somos especialmente meticulosos con los frenos de un vehículo.
El mantenimiento de los frenos de disco debe realizarse cada 15.000/20.000 kilómetros o una vez al año, lo que primero suceda. El cambio de las pastillas es aconsejable realizarlo cada 40.000 kilómetros, mientras que los discos delanteros serán reemplazados cada 80.000 kilómetros o, como mínimo, cada dos cambios de pastillas.
El conjunto de frenos traseros no está sometido a tanto estrés y, por consiguiente, desgaste, como los frenos del eje delantero. Por este motivo, la sustitución de discos y pastillas de freno se realiza en intervalos más largos, y estará definido por el desgaste que nuestros mecánicos detecten en cada revisión de frenos.
En lo que respecta al líquido de frenos, la comprobación de su estado y la verificación del nivel se realiza cada año, coincidiendo con los mantenimientos A o B de Mercedes Benz. Sin embargo, es recomendable que el cambio de líquido de frenos se realice cada dos o 40.000 kilómetros, lo que primero suceda.
Cuando se trata de frenos de tambor, el cambio de las zapatas se realiza cada 50.000 kilómetros aproximadamente. Mientras tanto, los tambores tienen una vida útil considerablemente más larga, alcanzando incluso los 120.000 kilómetros. Como parte de su mantenimiento, es recomendable limpiar y quitar el polvo y otros restos en cada cambio de zapatas.
Síntomas que alertan de que los frenos necesitan mantenimiento
Existe una serie de síntomas que te avisan de que el sistema de frenos de tu Mercedes necesita mantenimiento. Si detectas alguno de estos signos será necesario acudir a uno de nuestros Talleres Oficiales Mercedes Benz de Grupo Concesur:
- El pedal de freno tiene demasiado recorrido: si al frenar detectas que es necesario pisar el pedal de freno demasiado para detener el vehículo, las pastillas podrían estar muy gastadas.
- Falta de fuerza de frenado: pisar el freno y el vehículo apenas aminora la marcha. Es probable que el nivel de líquido esté bajo, que haya fugas en el sistema o aire en el circuito.
- Vibraciones y temblores en el volante al frenar: en las frenadas notarás unas vibraciones y temblores acusados en el volante. Los discos o las pastillas pueden estar deformadas o presentar signos de desgaste irregular. También puede deberse a que el líquido de frenos está muy caliente y se hayan creado burbujas de aire. En ambos casos, es importante acudir al taller para hacer el mantenimiento del sistema de frenos.
- Chirrido metálico en las frenadas: este es el síntoma más fácil de detectar. En las frenadas escucharás un estridente sonido metálico. Las pastillas están gastadas y, bien el avisador de desgaste o la propia zapata está rozando contra los discos.
- Al frenar, el coche se desvía hacia uno de los lados: en este caso, puede haber alguna anomalía en el circuito de frenos. Por ejemplo, que haya aire en el sistema o que el servofreno no esté funcionando adecuadamente.
- Se enciende el testigo del ABS en el cuadro de instrumentos: si la luz se enciende en marcha, puede que el nivel de líquido de frenos sea muy bajo o que el sistema antibloqueo de frenos esté averiado. Es importante acudir al taller para su comprobación.
Revisión de frenos precio
El precio de la revisión de frenos varía en función de los trabajos de reparación y/o sustitución a realizar. No será lo mismo reemplazar los discos que cambiar y purgar el líquido de frenos. Lo mismo ocurre si se detecta algún fallo en el ABS o el servofreno, o si se trata de un simple cambio de pastillas.
En Grupo Concesur, realizamos una revisión del sistema de frenos de tu Mercedes Benz en cada mantenimiento periódico, por lo que no tiene un sobrecoste. En el caso de detectar alguna anomalía, te informamos de todos los detalles de la reparación o sustitución para dejar los frenos del coche en perfecto estado de nuevo.